Ahorrar es un hábito de finanzas personales que se puede aprender a cualquier edad.
Ahorrar es un hábito de finanzas personales que se puede aprender a cualquier edad. Sin embargo, resulta más sencillo y conveniente si se aprende sobre el tema desde pequeños en el hogar. “Ahorrar es guardar dinero que tengo hoy para gastarlo en el futuro. Y los niños pueden hacerlo con la propina (si los padres hemos decidido dársela) u otro tipo de ingresos que puedan tener, como regalo de cumpleaños”, explica Mavilo Calero, gerente de la división Comercial de Financiera Confianza.
Algunos beneficios de tener como hábito el ahorrar son el cumplir sueños, alcanzar metas, afrontar imprevistos, vivir más tranquilos y tomar decisiones sobre el futuro con calma. Por ello, Calero comparte varias recomendaciones para que puedas enseñarles a tus hijos a ahorrar en casa:
1.- Enseñar con el ejemplo:
Adopta las cualidades y comportamientos de manejo del dinero que quisieras ver reflejadas en tus hijos. Ahorra un porcentaje de tus ingresos y comparte esa experiencia con ellos de manera regular. Explícales por qué lo haces e involúcralos en el proceso de manera práctica, sin cargas de moral o juicio.
2.- Aprender a ahorrar es aprender a esperar:
En 1972, un profesor de la Universidad de Stanford le dio a varios niños dos opciones: recibir un marshmallow de forma inmediata o dos, si esperaban un periodo de tiempo. Si bien era gracioso ver, detrás de un espejo, quienes lo tomaban y quienes apostaban por la doble recompensa, lo verdaderamente sorprendente fue que, luego de hacerles seguimiento por décadas a estos niños, encontraron que aquellos que esperaron tenían mejores relaciones, niveles de educación e índices de salud.
“Esto se relaciona con el ahorro porque el desarrollo del autocontrol a temprana edad también se ha relacionado con los niveles de deuda en la vida adulta y con el éxito financiero. La habilidad de guardar dinero, evitar compras impulsivas y trabajar hacia una meta es la misma habilidad que se requiere para resistir y no comerse el marshmallow”, explica Calero.
3.- Elegir y ser fiel:
Para los niños más pequeños es fácil guardar todo su dinero porque no comprenden los gastos que pueden realizar. Pero los más grandes quieren que su dinero haga muchas cosas. “Por eso debemos enseñarles y ayudarles a elegir un monto específico para ahorrar y apegarse a él. Si fijan un 20% como ahorro y les dan un regalo de cumpleaños en efectivo, entonces un 20% debe ser ahorrado obligatoriamente y el resto puede gastarse”, indica Calero.
4.- Ahorra antes de gastar, no después:
Esta recomendación va de la mano con la anterior y es muy importante, pues esta es la razón por la que muchos adultos encuentran dificultad para ahorrar. “Tendemos a elegir mal el momento, quieren ahorrar lo que queda después de gastar, y muchas veces no queda”, señala el especialista y agrega que “el momento correcto para ahorrar es al principio, cuando se recibe el dinero. En este instante, el dinero de ahorro se aparta en una cuenta específica o en un sobre o en una alcancía en función del porcentaje previamente elegido, y son los gastos los que se ajustan a lo que queda”.
5.- No les des todo lo que pidan:
Todo padre o madre quiere ver feliz a sus hijos, pero debemos resistir darles todo lo que pidan y utilizar esos deseos y motivaciones para ayudarlos a fijarse metas estimulantes que les faciliten el esperar y ahorrar para adquirir ellos mismos esas cosas con su propio dinero. “Recuerda que los adultos también debemos practicar algo de espera y que los aprendizajes toman tiempo”, sugiere el experto.
Una forma para ayudar a los niños a esperar y tomar decisiones es enseñarles a priorizar usando la lista de deseos. “Cada cosa que quieren se apunta o dibuja en una lista, dependiendo de la edad del niño. Y una vez que tengan cierta cantidad de dinero reunida, podemos ir a por la lista y decidir entre todas cuál es la verdadera prioridad”, añade Calero.
Diario La República [21.04.2022]