La propuesta incluye 17 medidas, incluyendo la eliminación del trabajo remoto y de la contratación por nuevas actividades.
El Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE) culminó el informe final de la Comisión Sectorial encargada de elaborar una propuesta de Anteproyecto de Código de Trabajo, medida impulsada por la titular de la cartera, Betssy Chávez. En sus 191 páginas detalla 17 medidas que modificarán los derechos y deberes en materia laboral para empleados y empleadores.
Una de las propuestas planteadas es la eliminación del tope máximo de indemnizaciones a pagar en caso se conceda la nulidad de un despido. Previamente el límite era de 12 remuneraciones. Así, la medida contempla la creación de la categoría de despido sin causa justificada y señala que si se diera esta situación, el trabajador puede optar por la reposición en su trabajo, el pago de sus remuneraciones devengadas o la indemnización equivalente a 45 días de remuneración ordinaria por año completo de servicios “eliminándose la referencia a un tope máximo”.
Según Diego Castillo, socio del estudio Hernández y Cía, esta medida propiciaría que las empresas busquen cada vez más contrataciones a través de empresas tercerizadoras, pues así evitarían el riesgo de tener que pagar sobrecostos ante el despido de un trabajador.
“Lo que va a generar este tipo de medidas es que aquellas compañías que no pueden despedir a sus trabajadores tendrán que pagar grandes indemnizaciones. Esto va a generar que las empresas busquen no contratar directamente, sino a través de terceros para que quien sea el responsable de ese pago sea la empresa tercerizadora”, afirmó.
Asimismo, Castillo advirtió que podrían darse casos de pequeñas empresas que entren en riesgo de quiebra si se aplicara esta medida y tuvieran que pagar una alta indemnización a un trabajador.
Además, Jorge Toyama, socio del estudio Vinatea & Toyama, indicó que este proyecto incrementará la rigidez en la protección al trabajador, siendo que el Perú es uno de los países en la región con mayores defensas en este aspecto.
“En el último ránking del World Economic Forum, Perú se ubica en el octavo lugar como país más rígido en el mundo al momento de despedir. No solo es eliminar el tope, sino también están la Compensación por Tiempo de Servicio (CTS) y la reposición. […] Esto hace a las empresas peruanas menos competitivas globalmente y puede desincentivar a las extranjeras a que pongan sus sedes centrales de la región en Perú”, aseguró.
Otras medidas
La propuesta del MTPE también contempla la eliminación del trabajo remoto para que sea reemplazado por el teletrabajo. Hasta antes de la pandemia alrededor de 2 mil personas se encontraban bajo ese régimen. “Los costos de la prestación de labores para el teletrabajo son asumidos o compensados por el empleador. Puede contratarse a alguien como teletrabajador o pactarse -por acuerdo- [que] un trabajador presencial pase a ser teletrabajador. [En ese] caso el trabajador puede revertir y volver al trabajo presencial”, señala la norma.
Esta situación eliminaría el trabajo remoto cuando el actual Gobierno prorrogó su vigencia hasta el 31 de diciembre del 2022 mediante el Decreto de Urgencia Nº 115-2021 que modificó la vigencia de esta modalidad. “El anteproyecto busca regresar al esquema anterior que hacía poco atractivo el esquema del teletrabajo, entre ellos que el empleador sea el que toma todos los gastos. También puedes generar sobrecostos en el empleado, porque las empresas que no accedan al teletrabajo terminarían regresando al trabajo presencial”, explicó Castillo.
Por otro lado, el proyecto también busca la eliminación de los contratos temporales por “lanzamiento de una nueva actividad”, por “reconversión empresarial” y por “emergencias”. De esta manera, se pasaría de nueve modalidades de contratación de duración determinada a seis.
Según Toyama, la medida desincentivaría la creación de nuevos puestos de trabajo. “Una construcción, una nueva sucursal o cualquier puesto nuevo que se crea por el desarrollo de una empresa debe ser de plazo fijo. Sin el incentivo de contratos temporales por el lanzamiento de una nueva actividad, le quitas el incentivo para crear nuevos puestos, pues una cosa es un contrato de pocos meses y otro a plazo indefinido”, remarcó.
Asimismo, Toyama advirtió que en el anteproyecto no se contemplan medidas para revertir la informalidad en las empresas, la generación de nuevos empleos ni la capacitación de los trabajadores.